Agua para la tierra de mi vida... para los barros secos que no pueden modelar nada... para las flores del alma que no pueden brotar por miedo...
Agua, agua para refrescar los surcos de mi vida, los que quieren enseñarme donde posar el pie y sólo pueden hundirse más y más al terminar el día caluroso y sofocante, que pide agua...
Laia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario